Instalación interactiva que explora la voz como materia prima del diseño.
Una cabina telefónica cubierta de musgo alberga a Gaia, una inteligencia artificial conversacional multilingüe capaz de dialogar en tiempo real, sin guiones ni respuestas programadas.

Durante el evento, más de 600 personas —niños, adultos y mayores— conversaron con Gaia en seis idiomas distintos: español, inglés, italiano, francés, japonés y tagalo. Se registraron más de 1.200 minutos de interacción, en un entorno que transformó un objeto analógico en una interfaz viva, íntima y reflexiva.

Gaia fue diseñada como un agente con voz propia: tono, ritmo y comportamiento definidos, capaz de adaptarse a contextos emocionales y culturales diversos. Su objetivo: fomentar la conciencia sobre nuestros hábitos, provocar preguntas, generar empatía y ofrecer una experiencia educativa desde el lenguaje.

Desarrollado en colaboración con Victoria, la plataforma de voz de Vidiv (Visual MS), el proyecto investiga la presencia, la ambigüedad y el intercambio abierto como ejes fundamentales de la comunicación del futuro.